Las mejores rutas de senderismo en Suiza
Suiza es uno de los paraísos del senderismo europeo. Con sus montañas y sus valles, en el centro del continente ofrece rutas para todos los gustos. Se cuentan hasta 32 y pueden ser nacionales, regionales y locales, algunos cuentan con estructuras de acceso para los discapacitados. No se puede esperar menos de un país tan organizado como Suiza.
Una de las rutas más conocidas es la Vía Alpina que atraviesa 14 vados y 6 cantones. Mide 370 kilómetros y se desarrolla a una altitud mediana de 2500 metros. Se sale de Vaduz para llegar a Montreux después de 19 etapas. Más larga aunque menos difícil es la Trans Swiss Trail, con sus 32 etapas por 488 kilómetros. Saliendo de Porrentruy se llega a Mendrisio, siguiendo los leyendarios caminos de herradura. Además se toca el punto más alto en el monte Gottardo. Gracias a la tupida red de transportes públicos, se puede coger un atajo y hacer algunos tramos en bus, tren o bote.
La Vía Jacobi, como puede sugerir el nombre, es un camino religioso que es parte de la más amplia ruta del Camino de Santiago. En la parte suiza une Bondensee a Ginebra y a lo largo de sus senderos se podrán encontrar iglesias, monasterios y capillas donde gozar de una experiencia mística única, además de admirar la belleza de la naturaleza suiza. Cuenta 33 etapas por 450 kilómetros y es posible tomar la Vía Jacobi en varias localidades. Además del recorrido tradicional, existen cuatro ramas laterales: Kreuzlingen-Rapperswil de 72 kilómetros en 3 etapas, Wattwil–Einsiedeln de 50 kilómetros en 2 etapas, Lucerna–Rüeggisberg de 124 kilómetros con 3600 metros de desnivel en 6 etapas y Friburgo–Moudon de 44 kilómetros en 2 etapas. Por su supuesto, se pueden hacer en distintos momentos.
El Nationalpark Trail es conocido también como el camino de las familias. Desde Champlönch hasta el Fuorn, mide solamente 6 kilómetros y se puede recorrer en dos horas y media, también en coche. No requiere mucha preparación pero por esto, no es menos bonito el camino o menos emocionante que el resto de las rutas. Se aconseja hacerla en verano, para poder admirar en toda su belleza el Alp Frimmels, hasta bajar en la Ova del Valle Ftur para pisar en tranquilidad los senderos entre el Piz y el Fuorn. El recorrido acaba en el romántico hotel Fuorn, el único hotel que cumple más de un siglo en todo el parque. Será una experiencia inolvidable para toda la familia.
